












La identidad visual de Clarés, una acogedora y sofisticada tienda de café, nació a partir de un proceso creativo profundamente conectado con la esencia del producto: el café en su forma más pura, apasionada y sensorial. El desarrollo del logotipo fue el punto de partida, concebido como una pieza clave que refleja la calidez, naturalidad y elegancia que caracterizan a la marca. Inspirado en los elementos orgánicos del café —como el grano, la hoja y el vapor—, el símbolo combina formas suaves con un trazo contemporáneo, logrando una estética equilibrada entre lo artesanal y lo moderno. Esta imagen no solo es distintiva, sino que también transmite los valores de Clarés: autenticidad, dedicación y una experiencia cuidadosamente curada. Cada elección dentro del sistema visual —desde la paleta de colores cálidos y terrosos, hasta la tipografía de carácter amable y sofisticado— fue pensada para acompañar el ritual del café con una narrativa visual coherente y envolvente. La marca busca acompañar cada momento, desde el primer sorbo hasta la última conversación en torno a una taza. En conjunto, el diseño transmite mucho más que una identidad gráfica: ofrece una atmósfera. Clarés se convierte así en un espacio donde el diseño se entrelaza con la pasión por el café, invitando a los visitantes a vivir una experiencia sensorial única, marcada por el cuidado en los detalles y la calidez en cada rincón.